29 de agosto de 2010

Carta a a una Canción

Querida Canción,


No sé qué tienen los 29 de Agosto, pero cada año son días mejores. Quizás sea algo psicosomático, no lo sé, pero cada año recuerdo esta fecha como un día estupendo.

El de este año se ha fusionado con el 28 de Agosto. Buena noche, risas, baile, en la mejor compañía. Con todo eso, el cansancio y dolores típicos de un día así, se olvidan.

Hoy he escuchado por casualidad una canción que marcó el 29 de Agosto de hace varios años. Os la dejo.



Edurne (Edi)

26 de agosto de 2010

Carta a la Amistad

Querida Amistad,

En pocas ocasiones te he mencionado en mi blog, pero hoy te escribiré sólo a ti. Quizás no he encontrado hasta ahora el día perfecto, o la ocasión perfecta, aunque ya tenía y sigo teniendo un día pensado. No hace falta que me preguntes si hoy escribiré sobre ti o no, el día que quieras leer algo sobre ti aquí, no me reservaré para otro día.

Si hace pocos días me decepcionaba con la palabra amistad, hoy me echo un punto en la boca y me callo a mí misma. Desde pequeña, he crecido al lado de alguien que cree rotundamente que la amistad no existe, y que me llamaba 'pequeña ilusita' porque yo se lo negaba. En cambio, siempre he estado lejos de creerme lo que por mí misma no podía comprobar. Y gracias a ello y a algunas personas, tú entre ellas, puedo asegurar que la amistad sí existe.

Decían en una película que existimos porque alguien piensa en nosotros. Y porque alguien cree en nosotros también. Me da igual que haya quien diga que la distancia es el olvido, sé que no lo es.

Y es por ti, y por otras personas, por las que sonrío, por las que hace que cada mañana merezca la pena levantarse con la seguridad de que será un día perfecto. Más aún, hace que la vida merezca la pena; y haga que la vida esté lejos de ser un asco y sea algo precioso.

Me gusta equivocarme y darme cuenta de que a veces no pienso las cosas cuando las digo. No puedo permitirme el error de creer que la amistad no existe cuando alguien me falla o me hace daño si por otro lado están personas que me animan, me hacen reir, me apoyan, me escuchan, les duele lo que a mí me duele, se alegran de mis éxitos, se preocupan por mí, me quieren de verdad aceptando aún con mis virtudes y defectos y quieren lo mejor para mí. Eso es amistad.

Cuesta escribir sobre la amistad. Es como el amor, por mucho que se diga cuánto se quiere a alguien no se puede decir nunca todo lo que se le quiere. Creo que no podré agradecerte todo lo que me escuchas, me animas, me aconsejas y aguantas mis comeduras de coco a altas horas.

No es palabrería, no es algo con lo que rellenar una entrada de blog, no es algo fácil de decir ni fácil de expresar. Es lo que hoy quería decirte, que te quiero.

Gracias por pensar en mí, por creer en mí, por existir. Gracias por demostrarme lo que es amistad.
Estaré siempre aquí, ya lo sabes.

Edurne (Edi)


PD: "Un abrazo vale mil palabras. Un amigo más." Lo he leído antes, ¿bonito verdad?

25 de agosto de 2010

Carta a una Dedicatoria

Querida Dedicatoria,

Haciendo limpieza de la bandeja de correo, me he encontrado con un poema que me dedicaron el día de mi 18º cumpleaños. Lo comparto con vosotros.


Mientras por competir con tu cabello,
oro bruñido al sol relumbra en vano;
mientras con menosprecio en medio el llano
mira tu blanca frente el lilio bello;

mientras a cada labio, por cogello,
siguen más ojos que al clavel temprano;
y mientras triunfa con desdén lozano
del luciente cristal tu gentil cuello;

goza cuello, cabello, labio y frente,
antes que lo que fue en tu edad dorada
oro, lilio, clavel, cristal luciente,

no sólo en plata o vïola troncada
se vuelva, mas tú y ello juntamente
en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.

Luis de Góngora.


Edurne (Edi)

24 de agosto de 2010

Carta Para Siempre

Querida Carta para Siempre,

Me encuentro aquí, en mi cama, tumbada, con el portátil encima de mis piernas. Hace unos 20 minutos he terminado de ver Los Girasoles Ciegos. Buena película, sin duda. Antes de dejar el portátil encima de un cojín rosa, apagar la lamparita, escuchar diez minutos de música con mi ipod (también rosa) y dormirme, decido volver a revisar mi correo y mis redes sociales para ver si alguien me ha escrito algo o por si hay alguien interesante conectado y charlar unos minutos.

Pero hoy haré algo más que todo eso antes de dormir. Hoy escribiré otra entrada de blog. Aunque la última que escribí lo hice ya en el día de ayer, se me hace raro escribir otra sin que pase más tiempo, más aún cuando hasta hace poco he estado exiliada.

Ese vistazo a mi correo y mis redes sociales, me ha hecho darme cuenta de que las palabras son demasiado fáciles. Es demasiado fácil decir un "te quiero", decir "amig@", decir "para siempre". Lo difícil es sentir eso que dices, y sobre todo, cumplirlo.

Hoy no escribiré como yo sé hacerlo. Escribiré, en la medida de lo posible, algo objetivo. Me sincero, pero de otra manera. Imaginaré que le estoy contando ésto a alguien que me escucha y dándome una palmada en el hombro me va a decir que no me preocupe, que todo irá bien. No escribiré pensando que ésto puede llegar al otro lado del mundo y pueden leerlo miles de personas.

Hubo un tiempo en el que alguien me dijo "te quiero", alguien me llamó "amiga" y alguien me dijo "para siempre". Todo ello recíproco, desde luego. Cosas que me creí. En cambio, mi lugar ha sido sustituído. Otras amistades, amor si me apuráis, otros te quiero, para siempre, materialismos, facilidad, comodidad, rutina, sinceridad, generosidad... Muchas palabras que ahorran largas explicaciones.

Decepción.

Es rarísimo ese sentimiento, eso que te recorre el cuerpo cuando ves o cuando lees que otra persona ocupará ese lugar que tú ocupabas antes. Es rarísimo. Saber que detrás de esas palabras, de esos momentos, de todo eso, no hay nada. Y ese nada duele.

Mi madre suele decirme que el ser buena persona es una virtud. Yo siempre le respondo que buenas personas somos todos, más o menos, mejores o peores, pero todos lo somos. Profundo error. Existen las malas personas.

Ya vale, Edurne, debes salir de tu burbuja y ver el mundo real, en el que las malas personas existen, y se hacen daño, y mienten, y son falsas, y se interesan, y hacen daño, y siguen haciendo daño, y no les importa.

No sé ni lo que digo. Creo que no es sano escribir a estas horas.

Quiéreme, sé mi amig@, para siempre. No hace falta que se diga, hace falta que se sienta, se demuestre y se cumpla.

Pediré algo muy sencillo: Un hombro, un clinex y un vaso de agua, por favor.

Dejo mi portátil en el cojin, me pondré el ipod y mañana si Dios quiere, será otro día.


Edurne (Edi)

23 de agosto de 2010

Carta a la vuelta

Querida Vuelta,

Ya estoy de vuelta. Por fin. Por fin en casa, en mi cama, en mi ambiente, entre mis cuatro paredes naranjas que me ven crecer... aunque de vez en cuando me aprietan. Por fin la rutina, ¡por fin! Es una rutina agradable.

El interrail sólo tiene una palabra para describirlo: INCREÍBLE. Lugares visitados:
Ginebra-Laussane-Berna-Zurich-Feldkirch-Lietchenstein-Salzburgo-Viena-Bratislava-Frankfurt-Colonia-Luxemburgo-Utrecht-Amsterdam.
Nos hemos encontrado desde personas de mi mismo pueblo de Córdoba, hasta lugares poco recomendados en los que entrar al wc era todo un riesgo. Pero ahora no es tiempo de comentar el Interrail, ya hay un proyecto para ello.

Después vinieron las Fiestas de Vitoria, junto con la visita de Jaione y mi santo. Mucho que contar en pocos días, desde comportamientos que confirman las sospechas que iba teniento desde hace tiempo, hasta el conocer a los mayores especímenes que uno puede imaginar. Aún así, me encantó ver a Jaione por tierras que no sean Bilbao o Londres. ¡Gracias por venir!

Y después, cómo no, al exilio. Córdoba. Visita breve que se ha pasado rápido. Pero ha merecido la pena, ¡¡¡he conocido a Claudia!!! Es preciosa, menudos ojazos azules. Vale, a ver, soy su tía, pero es la verdad. Una gran tropa nos reunimos para celebrar su llegada, aunque ni estabamos todos los que somos, ni somos todos los que estabamos.

Pero como siempre, el exilio es un lugar en el que las horas pasan muy despacio y hay mucho que hacer, leer, pensar, escribir... Entre decepciones y alegrías, el exilio ha pasado.

Ahora unos días, y de vuelta a la uni. El año pasado por estas fechas estaba bastante asustada, y al final ha sido un año sin palabras.
Este año no estoy nada asustada, ¿cómo será entonces?

Os dejo unas fotos resumen del verano.











Edurne (Edi)

7 de agosto de 2010

Carta a un Exilio

Querido Exilio,

Y como cada verano, me marcho.
Exilio durante 15 días a un lugar donde la civilización queda lejos y da tiempo para pensar, leer y escribir.

Nos vemos pronto.

Edurne (Edi)

6 de agosto de 2010

Carta a unos segundos

Queridos Segundos,

La vida es sólo unos cuantos segundos. En unos segundos llegas en el mundo y en otros pocos segundos dejas de estar.

Te adormeces unos segundos al volante, y en unos segundos se acabó todo. En unos segundos una anestesia se convierte en demasiado y ya no estás. En esos segundos se ha quedado alguien viuda, alguien huérfano, alguien se ha convertido en hijo único, alguien ha perdido a su hijo, alguien ha perdido a un amigo.

El momento en el que un médico le explica a su paciente que su enfermedad no tiene cura y que a partir de ahí empieza su vida de otra manera; o el momento en el que una chica deja a su novio después de minutos que se convirtieron en horas, y después en meses, y luego en años... Esos momentos duran unos segundos.

No hay nada más lento que los momentos que no deben llegar. Aunque cuando llegan son sólo unos segundos.

Los momentos más difíciles sólo duran unos segundos. Después está toda la vida para solucionarlos.

En cambio un beso, una mirada, una sonrisa, una caricia, duran unos segundos.
Pero duran, y alegran toda la vida.

La vida dura sólo unos segundos.

Edurne (Edi)