24 de agosto de 2010

Carta Para Siempre

Querida Carta para Siempre,

Me encuentro aquí, en mi cama, tumbada, con el portátil encima de mis piernas. Hace unos 20 minutos he terminado de ver Los Girasoles Ciegos. Buena película, sin duda. Antes de dejar el portátil encima de un cojín rosa, apagar la lamparita, escuchar diez minutos de música con mi ipod (también rosa) y dormirme, decido volver a revisar mi correo y mis redes sociales para ver si alguien me ha escrito algo o por si hay alguien interesante conectado y charlar unos minutos.

Pero hoy haré algo más que todo eso antes de dormir. Hoy escribiré otra entrada de blog. Aunque la última que escribí lo hice ya en el día de ayer, se me hace raro escribir otra sin que pase más tiempo, más aún cuando hasta hace poco he estado exiliada.

Ese vistazo a mi correo y mis redes sociales, me ha hecho darme cuenta de que las palabras son demasiado fáciles. Es demasiado fácil decir un "te quiero", decir "amig@", decir "para siempre". Lo difícil es sentir eso que dices, y sobre todo, cumplirlo.

Hoy no escribiré como yo sé hacerlo. Escribiré, en la medida de lo posible, algo objetivo. Me sincero, pero de otra manera. Imaginaré que le estoy contando ésto a alguien que me escucha y dándome una palmada en el hombro me va a decir que no me preocupe, que todo irá bien. No escribiré pensando que ésto puede llegar al otro lado del mundo y pueden leerlo miles de personas.

Hubo un tiempo en el que alguien me dijo "te quiero", alguien me llamó "amiga" y alguien me dijo "para siempre". Todo ello recíproco, desde luego. Cosas que me creí. En cambio, mi lugar ha sido sustituído. Otras amistades, amor si me apuráis, otros te quiero, para siempre, materialismos, facilidad, comodidad, rutina, sinceridad, generosidad... Muchas palabras que ahorran largas explicaciones.

Decepción.

Es rarísimo ese sentimiento, eso que te recorre el cuerpo cuando ves o cuando lees que otra persona ocupará ese lugar que tú ocupabas antes. Es rarísimo. Saber que detrás de esas palabras, de esos momentos, de todo eso, no hay nada. Y ese nada duele.

Mi madre suele decirme que el ser buena persona es una virtud. Yo siempre le respondo que buenas personas somos todos, más o menos, mejores o peores, pero todos lo somos. Profundo error. Existen las malas personas.

Ya vale, Edurne, debes salir de tu burbuja y ver el mundo real, en el que las malas personas existen, y se hacen daño, y mienten, y son falsas, y se interesan, y hacen daño, y siguen haciendo daño, y no les importa.

No sé ni lo que digo. Creo que no es sano escribir a estas horas.

Quiéreme, sé mi amig@, para siempre. No hace falta que se diga, hace falta que se sienta, se demuestre y se cumpla.

Pediré algo muy sencillo: Un hombro, un clinex y un vaso de agua, por favor.

Dejo mi portátil en el cojin, me pondré el ipod y mañana si Dios quiere, será otro día.


Edurne (Edi)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

edurne que se supone ke el que estaba mal era yo eh jajaj. en fin. creo que entiendo por que dices todo esto, pero bueno la vida es asi. y si, hay personas malas aunke no lo creas. un besazo y mñn estaras mejor creeme

Miriam dijo...

No sé. Yo creo que todos somos un poquito o un mucho buenos y malos. Y nos hacen daño y hacemos daño.
Me gusta pensar que el que alguien me olvide no significa que en un momento dado me quiso con toda el alma. Y ese momento, aunque ya haya pasado, vale oro
Un abrazo,
(me gustan tus cartas)

Amaya dijo...

Ánimo twin, piensa que l@s verdader@s amigos siempre estaremos ahí, pero sí, hay gente que parece que no tiene sentimientos para con los demás... hay quien como Hobbes fue más lejos y pensó que el hombre era un lobo para el hombre. Aunque eso sea un poco exagerado, tiene un punto de verdad.

Ánimo ;)

Luis y Mª Jesús dijo...

Hace unos momento un militar con una graduación altísima lloraba porque mientras el estaba fuera -en misión- otro ocupó su lugar.

Su mujer tiene -seguro- miles de argumentos pero hay algo muy claro: no cumplió su compromiso.

Comprometerse es esa palabra que últimamente esta muy poco de moda pero dice mucho de las personas.

Aprende a distinguir quien es capaz de comprometerse y quien no para el futuro, es importantísimo. Solo el que es capaz de ser fiel a sí mismo y a sus compromisos puede ser fiel a otro. Eso exige madurez.
Un beso

Por cierto, me encantó esta carta. Si no consigues dormir escribe, por favor