4 de diciembre de 2009

Carta a una parte del cuerpo

Querida parte del cuerpo,

Cuentan que había una madre que quiso poner a prueba hasta dónde llegaba la capacidad de pensamiento de su hijo, a la vez que quiso enseñarle ciertos valores morales a través de una pregunta:

- "Dime hijo, ¿cual es la parte más importante del cuerpo?"

El niño no entendió qué quiso decir su madre con aquella pregunta, y mucho menos entendió qué respuesta tenía que dar.

Se tomó su tiempo, quiso reflexionar sobre la pregunta y sobre todo encontrar una respuesta acertada. Tras mucho pensar, creyó encontrar la respuesta:

- "¿Es posible que la parte más importante del cuerpo sea la cabeza? Sin ella no pensaríamos, no podríamos hacer nada...
- La cabeza es importante sin duda, pero no es la respuesta que debes encontrar.
- Entonces... ¿las piernas? Sin ellas no nos sujetaríamos ni caminaríamos, ni tampoco sin la columna.
- No hijo no. Debes pensarlo con más calma."

El niño por más que pensaba, no encontraba respuesta alguna. De este modo, muy a su pesar, se rindió y le pidió a su madre que le dijese la respuesta.

- "Me rindo, dime cuál es la parte más importante del cuerpo.
- La parte más importante del cuerpo es el hombro.
- ¿El hombro?
- Sí, el hombro. En el hombro de un amigo te puedes apoyar para recibir su cariño, afecto, apoyo, ánimo... Quien tiene un hombro de un amigo para apoyarse, tiene oro. Y quien tiene un amigo, tiene un tesoro."



Edurne (Edi)



" Creo que una vez recibí una carta, pero ya casi ni lo recuerdo."

4 comentarios:

Unknown dijo...

¿Publicado a las 3:58? Hija, vas a resultar más buho, (buha según la ministra...), que yo... xDD. Me ha gustado tu carta. Qué importante es a veces tener un hombro cerca, aunque sea simplemente para escuchar. Uno, que ya va para los 50, ha tenido en su vida muchos "amigos" que se esfumaron cuando tuvieron que ejercer de amigo de verdad. Pero aparecieron otros, muchos de ellos gente que yo no esperaba, que ocuparon su lugar, sin pedir nada a cambio. Asi que salí ganando con el cambio.

Por lo que veo, a pesar de todo el curre que tienes, te queda tiempo para una cartita. Ánimo, que los infartos dan a mi edad, no a la tuya jaja. Y mírate eso del costado, no lo dejes. El consultorio de la c/ Santiago está abierto hasta medianoche, y a veces te dan las uvas, pero son gente muy maja. Muxus.

Edurne Beltrán dijo...

La hora del blog va como quiere, porque fíjate en la hora que me has comentado---

Luis y Mª Jesús dijo...

Me gusta la carta, pero... me has recordado que llevo casi un mes con una prescripción para el fisio: tendinitis en el hombro derecho, y no he tenido tiempo ni siquiera para pedir hora. Habrá que arreglar el hombro dado que es tan importante.
Besos

Elenilla dijo...

Que bonita carta! Yo habría respondido la cabeza lo primero y luego el corazón. Jamás se me habría ocurrido decir el hombro!

Besos