22 de diciembre de 2009

Carta al exilio

Querido Exilio,


Me despido. En unas horas marcho al exilio, a Córdoba. Es época de ver a la abuela, tíos, primos, sobrinos...


¡Y cómo no de estudiar! Que mis libros/apuntes ocupan casi más que mi ropa...


Estaré ausente bastantes días, no sé si el generoso vecino de mi abuela seguirá proporcionando wifi gratis a todo el barrio.


La verdad despido el año con buen sabor de boca. He sido feliz, he conocido a gente estupenda, he conocido más a quienes ya conocía. Me he conocido más a mí misma aunque no del todo, ni tampoco lo haré nunca. He conocido lugares geniales, como algunos blogs, Deusto, Bilbao... en los que estoy muy a gusto y estoy decidida a quedarme en ellos.


Os deseo lo mejor para estas fechas, y os deseo que este año nuevo esté lleno de felicidad y salud para todos; y amor, dinero y trabajo tambien para quien lo necesite. Espero que Cartas a los Míos siga funcionando tan bien como hasta ahora, que mis cartas sigan llegando tras una Brisa de Susurros inactualizable, que me siga llegando apoyo y ánimo Desde el 5ºB y que mis cartas también lleguen hasta allí, que mi Barbie Desertora nunca desierte, que Ceci siga Sin pausa..., que Elenilla, Inés, Juancar, Celes, Andrea, Jaime y demás blogueros, y sobre todo los que me leéis cada día y aguantáis mis sermones e intentáis conocerme, sigáis como hasta ahora y sigáis siendo parte de mis Cartas.


Os echaré de menos, al igual que quienes se quedan en estas tierras vascas. Hoy ha sido el fin del semestre, y la verdad es que me da pena. Terminamos con EECC y vamos a empezar con Historia de las Civilizaciones... Mi asignatura favorita va a ser cambiada por la asignatura que peor se me ha dado desde que tengo memoria... Un mal trueque, ¿no?


Nada más, sed felices, disfrutad, descansad, estudiad y no comáis mucho. Yo me propuse no comer ningún polvorón, mazapan, turrón, etc. hasta el día 24. Mi madre me engañó con un trocito de turrón diciéndome que era un trocito de chocolate... No he cumplido mi propósito...


Cuidado a los que viajais, que lo importante es llegar. Aunque suene tópico es cierto, os quiero a todos conmigo. Este año han salido personas importantes de mi vida, bien por problemas de relación, o bien porque hemos cogido caminos distintos. No quiero que este año NADIE de mi vida se vaya.



Hasta pronto compañeros.


Edurne (Edi)



[PHOTO]: El sábado con los ya tradicionales gorritos de cumpleaños. Para ver el video haciendo el 'monguis', visitad el blog de Susana.


20 de diciembre de 2009

Carta a un comentario

Querido Comentario,


"Cuando lo diferente y lo diverso se convierte en algo 'propio' uno mismo se enriquece, de modo que puedes sentirte feliz y orgullosa."


Hay comentarios y correcciones que no se olvidan.
Al igual que tampoco se olvidan a esas personas.
Sé que no comentas por aquí, pero me imagino que leerás ésto.
Gracias ;)

Edurne (Edi)

Carta a unos propósitos

Queridos propósitos,


Fuera de los típicos propósitos que todos nos hacemos cada 1 de Enero, hay varios propósitos o deseos que tengo para este año nuevo que entra. Sé que muchas personas se hacen propósitos y realmente no fijan fecha para empezar ese propósito. Es decir, decimos que haremos mil cosas este año pero este año nunca llega. Soy la primera que ese tipo de propósitos de ser mejor persona, adelgazar, hacer deporte, leer, estudiar más y ser más ordenado... se lo propuso hace tiempo, pero lo que no fijó fue la fecha de empezar con esos propósitos... :P



Pues bien, aquí tengo alguna cosilla que me gustaría que sucediese este año:

  • Que los discos de vinilo se fabriquen como los crêpes.
  • Que el autobús de la universidad vaya de puerta a puerta desde mi casa hasta la uni.
  • Que haya dos asientos por viajero en ese autobús.
  • Que los trenecitos de las castañas se sustituyan por trenecitos de gofres de chocolate.
  • Que en los restaurantes haya también botes con salsa Ali-oli.
  • Que se cree la vacuna en contra del Cáncer de Mama.
  • Que se cree la vacuna para cualquier tipo de cáncer. Y para cualquier tipo de enfermedad.
  • Que por las calles haya músicos y alegren a los peatones.
  • Que los coches de color rosa sean más habituales.
  • Que haya moto-taxis.
  • Que se regalen diccionarios a quienes nunca han sabido lo que es la humildad (aunque no estoy del todo segura de si así se acabará con la anti-humildad).
  • Que quienes viven a 1000 km de aquí no se mueran de hambre.
  • Que haya un avión directo Vitoria-Córdoba.
  • Que todos sepamos hablar inglés como idioma materno.
  • Que dar abrazos esté más de moda. Pero que sean de corazón.
  • Que las palabras Te Quiero se digan cuando realmente se quiere a alguien, y se digan con frecuencia.
  • Que mi despertador suene con menos crueldad.
  • Que las películas Amelie, Sonrisas y Lágrimas y Forrest Gump se den por la tele cada semana por lo menos una vez; y que sea obligatorio que todo el mundo lo vea al menos una vez en su vida.
  • Que los domingos por la tarde esté prohibido estudiar y hacer deberes.
  • Que los lunes se dejen de llamar lunes. Aunque después el sustituto de ese nombre también lo detestaría.
  • Que los jardines estén llenos de narcisos amarillos.
  • Que se publiquen comics de Zipi y Zape semanalmente. Y que cuesten 1€.
  • Que cada uno vista, sea y tenga los gustos que tenga sin que nadie se meta con él.
  • Que quienes quiero sean felices y estén SIEMPRE conmigo.
  • Que las sonrisas sean 'tics'.

Edurne (Edi)

PD: Deseando ver las fotos y videos de ayer. Aunque hoy me encuentro hecha una piltrafa...

18 de diciembre de 2009

Carta a un cuento

Querido cuento,

Hace cosa de un mes hicimos limpieza en el despacho de mi padre. Apareció una carpeta con dibujos, cuentos y cosas escritas por mí de cuando yo era niña. Me senté allí mismo y leí todo lo que encontré. Me recordó a la película 'Amelie' cuando hace que un hombre se encuentre con una cajita con juguetes y pequeños recuerdos de su infancia. Ahí mismo cita esta frase:


“ Sólo el descubridor de la tumba de Tutankamon podría comprender la emoción de Amélie al encontrar este tesoro escondido por algún niño, 40 años atrás. “ Amélie. 2001.





Encontré cuentos, historias, descripciones, cartas... Me hizo preguntarme por qué llevo toda mi vida delante de un papel y un lápiz / teclas de ordenador. Sé que pocos me entenderán por eso de que me gusta leer y escribir... Pero es lo que me hace feliz, lo sabéis.

Lloré incluso de la risa cuando encontré este cuento... Es buenísimo. Está firmado como que lo escribí el 13 de Enero de 1996, cuando no tenía ni 5 años... Quería guardarlo para el futuro y leerlo cuando tuviese 50 años, pero me apetece compartirlo con vosotros, y que también os riáis y lo disfrutéis. Lo copio exáctamente igual que como está escrito en la hoja, tildes incluídas:

El pajaro volador
"Érase una vez un pájaro llamado John Smith que significa, Dios del Sol. Pero le llamaban, Esmi. Tenía el pelo blanco como la nieve, ojos azules y comía hierba buena. Un día estaba en su nido... comiendo hierba buena y oyó... Tic tic tic... era un pájaro carpintero... hola... sijo Esmiz, hola dijo el pájaro carpintero... el pájaro carpintero era de color marrón, ojos negros, alas verdes y rojas y pestañas finas. Como te llamas, dijo Esmiz. Lani dijo el pájaro carpintero. Y tu, dijo Láni. Esmiz. Fueron al nido de Esmiz y estuvieron hablando 2 horas y pensaron casarse. Lina puso dos huevos."



¡Alucino! Eso escribí con casi 5 años... Está escrito en el centro del folio con la letra perfectamente torcida hacia la esquina superior derecha. Supongo que sería por el equilibrio en el que se encontraba mi vida en ese momento y por lo positiva que me encontraba ese día.


Apuntaba maneras desde tan pequeña. Aunque este cuento no es para contárselo a niños, los cuentos nunca se me han dado especialmente bien.


Edurne (Edi)

PD: ¡Qué buena la frase de hoy! La del cuadrito azul de la columna de la izquierda me refiero, que cada día aparece una frase distinta. La de hoy es: "Quien puede decir cuánto ama, pequeño amor siente."

Carta a la nieve


Querida nieve,


El invierno ha llegado antes de que me haya dado cuenta. A principios de este mes aún usaba la chaqueta blanca o la gris, típicas no muy gorditas que mi madre allá por Octubre ya las hubiese retirado. Ahora ni el abrigo negro es suficiente. Yo que nunca he sido muy amiga ni de las bufandas ni los guantes.... por ahora ya me he echo buenas migas con la bufanda. El gorro y los guantes sí que no van a ser camaradas míos nunca, odio que los rizos se me aplasten por el gorrito y que las manos empiecen a picar por culpa del calor de los guantes; tampoco me molesta mucho el frío en las manos aunque casi siempre las llevo en los bolsillos.


El invierno me sienta mal, aunque el calor me sienta peor. El frío me va mal físicamente y el calor psicológicamente. Todos los catarros de mi alrededor los termino cogiendo yo. Si en mi casa mi padre coge un catarro, me lo pega, si lo coge mi hermano mayor, me lo pega, etc. Ahora mismo estoy notando los primeros indicios de un catarro. Me cae moquito y llevo un clinex en la manga (no muy sucio mal pensados...), ojos cargados y con lentillas que se resisten a pegarse, cara y frente caliente, la cabeza pesa, y las horas se pasan muertas porque no hay ganas de hacer nada. Pero no hay tiempo a detenerse para cuidarse, mañana cumpleaños de Laura y ya el martes vacaciones. Así que esta noche couldina y a la cama.


Cuando es invierno estoy deseando que llegue el verano porque creo que toda la ropa de mi armario es más adecuada para esa época del año, y cuando es verano veo que toda la ropa abriga demasiado. Qué lío... ¡mi madre está ya quemada con el asunto!


Ahora con eso de ir a tierras bilbaínas cada día está el peligro de las carreteras... Hoy más de hora y media para llegar... uff.. Y si a la vuelta volvemos con una chófer loca.... Podéis creer, que con el frío y la nieve que hace, adelanta a los quitanieves y nos pone el aire-acondicionado que vamos todos con los abrigos puestos... Si esta chófer es lectora de mi blog, por favor, que vaya más despacio y que de a la calefacción.


Aquí os dejo unas fotos sacadas hoy en el bus de vuelta. A ver si el móvil no se me congela con los -14º que anuncian para el lunes...








Edurne (Edi)

15 de diciembre de 2009

Carta a una parejita

Querida parejita,

Hoy volvía a casa de la uni y estaba esperando a que un semáforo se pusiese en verde. A mi lado, junto a una farola había unos "niños" que no levantaban más de 1'30 metros y no llegarían ni a los 13 años. En medio de esos "niños" y yo, había un señor, que estaba mirando atónito lo que hacían esos "niños". Se estaban dando un beso con todas las letras. No entraré en detalles, pero era entre sorprendente y curiosa la escena. El señor y yo nos mirábamos y echabamos una pequeña sonrisa a la vez que fruncíamos el ceño. El niño, apartándose de la boca de la niña, nos miró y nos dijo:

- "Qué pasa, ¿nunca habéis visto darse un beso a dos enamorados?"

Y volvió rápidamente a sumergirse en la boca de la niña. Yo no sabía qué responder y decidí echarme a reir. El señor me miró y me dijo:

- "¡Vaya con la parejita!"

El semáforo se puso en verde y ambos cruzamos la calle, dejando atrás a la parejita. Mientras llegaba a casa, no podía dejar de pensar en aquel niño y en que probablemente en ese momento ese niño pensaría que era más maduro que yo y que me daba mil vueltas por todos los lados.

Recuerdo mis 13 años, y la verdad es que no los recuerdo en la boca de nadie. Si hago memoria, creo que no conozco a nadie que supere lleve casado con su amor desde la adolescencia. Ésto mismo lo pensaba con 13, y con 14, y con 15, y con 18 lo sigo pensando. Lo más parecido que conozco a un amor "de toda la vida" es una de mis tías, que está casada con su mejor amigo desde la más tierna infancia.

No entiendo las ganas que tienen los "niños" de hoy en día de correr y que lleguen algunas etapas. ¡Cómo si no hubiese tiempo para sufrir por amor! Pero no sólo en este ámbito, cada día escuchamos que cada vez más chicos de unos 13 o 14 años empiezan a fumar o a beber, o cada vez que entro a los baños de un bar veo a chavalillas de esa edad maquillarse mientras sufren sobre tacones.

Parece que he sido una aburrida en mis años atrás si leemos ésto, pero no es así. Yo era de las que no iba de botellón, ni escondía el tabaco en el fondo del armario. Yo prefería salir al cine, a cenar, bolera, compras o a hacer mil cosas más con mis amig@s. Decidía los ambientes, y las amistades. Ambos eran muy sanos.

Entre esos ambientes, conocí lo que es tener novio-bolso. También conocí el tener a un novio al que aguantar cualquier cosa con tal de dar la imagen de guay estando con él. Y cómo no, conocí el tener novio al que se querría dejar pero no se hace porque se lleva tanto tiempo juntos que ya es parte de una misma. Aunque el caso más conocido es el de tener novio por tener y porque forma parte de las "Guayismos Rules".

Yo también decidía que ninguno de estos casos iba a ser el mío. Ya sabéis, nunca he sido demasiado guay. Aunque siempre he respetado cualquiera de estos casos, no me hacen ningún daño, simplemente así es como opino y no comparto esas ideas.

Hoy Aintzane y yo debatíamos el si alguien puede ser capaz de sentirse enamorado o de querer a una persona que conoces de una semana. Ella afirmaba un sí y yo afirmaba un no. No creo que conociendo a una persona de una semana se le pueda QUERER y saber todo de él y echarle de menos cuando no está, etc etc.... No sé, será que nunca me ha pasado. El día que me pase le daré la razón a Aintzane y compartiremos opinión.

Ante todo ésto, me afirmo en que prefiero seguir durmiendo sola y en que no pienso quemar ninguna etapa en mi vida.

A veces me preocupa lo poco guay que soy...

Edurne (Edi)

13 de diciembre de 2009

Carta a un artículo

Querido artículo,


Si sois de naturaleza sensible no recomiendo que leáis el siguiente artículo.
Yo me quito el sombrero.
Y también tengo que ir a vomitar.


Arturo Pérez-Reverte. Artículo "Esas Zorritas". XL Semanal.



" Esas Zorritas

Pues resulta que no. Resulta que si el padre de Mariloli, que tiene doce años, llega a casa y tiene el día tonto y la viola, y luego sigue haciéndolo repetidamente durante los próximos meses y años, y la muy zorra no opone resistencia que no se doblegue con algunas amenazas y bofetadas, resulta que la cosa no es grave. O sea, que no es delito como para llevarse las manos a la cabeza, y siempre habrá un juez comprensivo y ecuánime, por ejemplo en la Audiencia de Barcelona, o en la de Ciudad Real, o en donde sea, que ponga las cosas en su sitio. Eso ha ocurrido en un par de casos recientes: el penúltimo, el de un fulano al que la dura Lex sed Lex, duralex, tras probarse que durante ocho años abusó sexualmente de sus dos hijas, rebajó la condena de catorce brejes de talego pedida por el fiscal a sólo cuatro años de cárcel. Lo que significa que el virtuoso cabeza de familia se verá en la calle poco antes o después de cumplir uno, siempre y cuando se lo monte como es debido, ponga el culo donde deba ponerlo, le haga la pelota a los boqueras del trullo, y luego salgan los de tratamiento diciendo: no, si parece buen chaval. Si un día raro lo tiene cualquiera.

Y es que según el código penal, o como se llame eso que tenemos vigente, y de cuya reforma aquí sólo se habla en serio cuando a un político lo encaloman por chorizo, resulta que la ley, en casos de violación, admite la posibilidad atenuante de que la menor haya dado su consentimiento, cuando la violada tiene más de doce años. O sea que basta que la torda tenga trece primaveras para que el señor juez, de cuyo criterio personal sigue dependiendo la interpretación de los matices de la ley, decida que no ha habido violencia o intimidación in estricto sensu o como carajo se diga, y absuelva al individuo. O como en el caso del fulano que citaba antes, que hizo doblete, le coloque cuatro años por la primera hija y veinte mil duros de multa por la segunda. Dos al precio de una.

Dicho de otra forma: que son todas unas putas y que no se puede ir por la casa de esa forma, provocando al padre que ve tranquilamente el fútbol. No se puede, con lo desarrolladas que ahora están las niñas de trece años, y las modas modernas, y las teleseries y toda la parafernalia, pretender que un padre de familia, que tiene sus necesidades como todo hijo de vecino, no se alivie de vez en cuando. Y si las muy lagartas no quieren, que lo digan. Pero no con la boca pequeña, o sea, no, papi, porfa, ni con ambigüedades que rápidamente disipan un par de bofetadas, sino oponiendo verdadera resistencia: agarrando un cuchillo de cocina -pero sólo para intimidar, porque si lo matan, van listas-, o arrojándose si es preciso por la ventana desde el cuarto piso, llevando en los virginales labios el antes morir que pecar, según el incuestionable ejemplo de santa María Goretti. Todo ello, a ser posible, ante testigos. Pero claro, eso es lo difícil. Lo fácil para esas pequeñas guarras es poner mala cara y protestar de boquilla, y en seguida consentir mientras el padre te quita las bragas; y luego decir es que yo no quería, es que me da miedo, es que me tiene atemorizada desde niña. Es que ustedes no conocen a ese hijoputa.

Por suerte aún hay jueces capaces de desafiar lo políticamente correcto y poner las cosas y los atenuantes en su sitio. Jueces que, gracias al Cielo, todavía conservan el sentido patriarcal de la sociedad y la familia -la Biblia proporciona incluso ilustres referencias, como el caso de Lot, al que sus dos viborillas emborracharon, y zaca- y son capaces de interpretar la ley como debe interpretarse: «A ver, niña, ¿te resististe?... ¿Pataleaste durante cuánto tiempo, reloj en mano?... ¿Hubo testigos del pataleo?... ¿Por qué sólo aguantase seis bofetadas, y no más?... ¿Probaste a hacer un hatillo y escapar de casa?... Porque al fin y al cabo, con trece años y con esas tetas ya puede una buscarse la vida, ¿no?... Veo que callas, pequeña Salomé. Pues te comunico que, según el código de Hamurabo, quien calla, otorga».
Confieso que tengo curiosidad por saber en qué para el juicio de ese otro individuo, a quien a primeros de mes detuvieron en Segovia por violar, según parece desprenderse de la denuncia de la madre y del parte médico, a su hija de 22 meses. Me juego un huevo de pato a que la pequeña zorra -algunas ya apuntan maneras desde la cuna- tampoco opuso demasiada resistencia.
Y ahora, disculpen. Tengo que ir a vomitar. "



Edurne (Edi)

8 de diciembre de 2009

Carta a Tianna Lewis

Querida Tianna Lewis,


Ayer se me encogía el corazón cuando leí que esta niña de dos años puede morir si llora o se sorprende por algo. Sufre una extraña enfermedad llamada RAS (Reflex Anoxic Seizure), y su corazón se puede parar por un fuerte llanto.


No tengo palabras para decir nada al respecto.


Edurne (Edi)


7 de diciembre de 2009

Carta a una niña

Querida Niña,

450 musulmanes se casan con niñas menores de 10 AÑOS, Gaza

Casamiento Musulmán Masivo. 450 hombres se casan con niñas menores de diez años en Gaza.
Redacción Publicado el 24 Agosto, 2009

Por Paul L. Williams, Ph.D. thelastcrusade.org

"Mahoma se casó con una niña de seis años. Pero el Islam ha evolucionado en 1.500 años. En la tierra de Hamas, en 2009, las novias tienen casi siete. Un evento de gala se ha desarrollado en Gaza: Hamas patrocinó un casamiento masivo para cuatrocientos cincuenta parejas. La mayoría de los novios estaban en sus medianos veinte; la mayoría de las novias eran menores de diez años. Dignatarios musulmanes, incluyendo a Mahmud Zahar, un líder de Hamas, estaban presentes para felicitar a las parejas que tomaron parte en la celebración, cuidadosamente montada. “Le estamos diciendo al mundo y a Estados Unidos que no nos pueden negar la dicha y la felicidad”, les dijo Zahar a los novios, todos los cuales estaban vestidos con idénticos trajes negros, y provenían del cercano campo de refugiados Jabalia. Cada novio recibió de Hamas un regalo de 500 dólares. Las prepúberes niñas, vestidas de blanco y adornadas con chillones maquillajes, recibieron ramos de novia.

“Presentamos este casamiento como un regalo a nuestro pueblo que se mantuvo firme enfrentando el sitio y la guerra”, dijo en su discurso el hombre fuerte de Hamas, Ibrahim Salaf. Las fotos del casamiento cuentan el resto de la sórdida historia. El Centro Internacional de Investigación Sobre Mujeres estima que, actualmente, hay 51 millones de niñas desposadas que viven en el planeta tierra y casi todas en países musulmanes. 29% de esas niñas desposadas son golpeadas regularmente y abusadas por sus esposos en Egipto; 26% sufren un abuso similar en Jordania.

Cada año, de acuerdo a UNICEF, tres millones de niñas musulmanas son objeto de mutilación genital. Esta práctica no ha sido ilegalizada en muchas partes de Estados Unidos. La práctica islámica de la pedofilia proviene del profeta Mahoma, que acumuló once esposas y muchas concubinas, después de la muerte de su primera esposa Khadijah, en 619 D.E. Después que la anciana esposa de Mahoma, Khadijah, murió en 619 D.E., él acumuló once esposas. Coordinó las visitas a las tiendas de sus mujeres a lo largo de sus ciclos menstruales. Su capacidad para la actividad sexual parecía no tener fronteras. Sahih Bukhari, uno de los más reverenciados textos islámicos, dice: “El Profeta solía visitar a sus esposas en forma cíclica, durante el día y la noche, y ellas sumaban once. Le pregunté a Anas, “¿Tenía el Profeta la fortaleza para ello?” Anas respondió, “Solíamos decir que el Profeta tenía la resistencia sexual de treinta hombres”.

1] Porque, en medio de esas delicias, el Profeta mantenía un establo de concubinas, incluyendo a Reihana, su cautiva ‘judía’. Sus esposas y amantes estaban obligadas, por la ley musulmana, a satisfacer sus necesidades sexuales en cualquier momento del día o de la noche, y el Profeta se reservaba el derecho de disfrutarlas “desde la cima de sus cabezas hasta la planta de sus pies”.
[2] Esto parecería no ser terrible para los estudiantes del Informe Kinsley, con excepción del caso de Aisha, la esposa favorita de Mahoma. Aisha era la hija de Abu Bakr, el mejor amigo del Profeta y su más fiel seguidor. Ni bien Mahoma posó sus ojos en Aisha, comenzó a fantasear con tener sexo con ella. Había un problema con esta fantasía. Aisha, en ese entonces, era un pequeña niña de cuatro o cinco años, mientras Mahoma era un hombre de mediana edad de cincuenta.



[3] Y aún así, el Profeta no perdió tiempo en hacer realidad su fantasía. Cuando Aisha cumplió seis años, Mahoma le pidió a Abu Bakr la mano de su hija en matrimonio. Abu Bakr pensó que esa unión sería impropia – no porque Aisha fuera simplemente una pequeña sino más bien porque él se consideraba hermano de Mahoma. El Profeta dejó rápidamente de lado esta objeción diciendo que la unión era perfectamente correcta a los ojos de Allah. Abu Bakr consintió. Y Mahoma tomó a la pequeña niña como su nueva desposada. Cuando estuvieron casados, Mahoma, en su misericordia, permitió que Aisha llevara sus juguetes, incluyendo sus muñecas, a su nueva tienda [4]. El casamiento fue consumado cuando Aisha tuvo nueve años y el Profeta cincuenta y tres [5]. Los tres años del período de espera no se debieron a la preocupación de Mahoma de no abusar de una niña sino, más bien, al hecho de que Aisha contrajo cierta enfermedad que provocó la pérdida de su cabello [6].



La pedofilia no fue practicada sólo por Mahoma, sino también sancionada por el Corán. En el debate sobre el período de espera requerido para determinar si una esposa está encinta antes del divorcio, el texto sagrado dice, “Si estás en duda en lo concerniente a aquellas de tus esposas que han cesado de menstruar, sabe que su período de espera debe ser de tres meses. El mismo período se aplica para aquellas que aún no han menstruado” (65:4). Aquellos que piensan que los musulmanes modernos han abandonado estas enseñanzas, deberían estudiar las fotos y videos que acompañan este artículo y recordar las palabras del Ayatollah Khomeini, el clérigo islámico más famoso del siglo 20:

Un hombre puede tener placer sexual de una niña tan joven como un bebé. Sin embargo, no debe penetrarla; sodomizar a una niña está bien. Si un hombre penetra y daña a una niña, entonces debe ser responsable por su subsistencia toda su vida. Esta niña, sin embargo, no cuenta como una de sus cuatro esposas permanentes. El hombre no tendrá derecho a casarse con la hermana de la niña… Es mejor para una niña casarse en una época en que comenzará a menstruar en la casa de su esposo, mejor que en la casa de su padre. Un padre que case a su hija tan joven, tendrá un lugar permanente en el cielo [7]. "
















Pero qué asco.

Edurne (Edi)




PD: No puedo dejar de mirar la cara de esta niña. La otra foto es el desfile de ese "circo", o no sé cómo llamarlo.





6 de diciembre de 2009

Carta a un silencio

Querido silencio,

Silencio. Es lo que se oye en cualquier calle por donde paso. Las calles no tienen ruido. Como mucho cualquier canción del Ipod que voy escuchando con mis auriculares de color rosa y azul. Ignoro si alguien grita mi nombre, si alguien pide auxilio o si una ambulancia me pide pasar. Sólo mi música, nada más. Siempre he pensado que ir sola por la calle y escuchar el silencio de la ciudad mezclado con las obras, coches, semáforos, personas hablando y niños llorando es triste y hace que los trayectos sean el triple de largos.

De pronto te veo venir hacia mí. Tú me ves. Ambos intentamos cruzar de acera, meternos en una tienda o hacernos los despistados y simular que no nos hemos visto. Pero en nuestros corazones hay un querer disimular y pasar de largo, mezclado con un querer volver a hablar y estar cerca.
No queda otra. Nos paramos, sin saber muy bien qué se nos viene encima ni qué va a ocurrir. Me quito los auriculares. Tras un tímido "Hola... ¿qué tal?", lleno de ganas de saber qué tal estamos; viene un pequeño bloqueo de si nos damos dos besos o no. Pero no es más importante el darnos dos besos, sino el quién da el pequeño paso para darnos dos besos. A los dos no encantaría ir por ahí diciendo que el otro se nos acercó a darnos dos besos porque no se resistía.


Desearíamos que el momento exacto en el que nuestras mejillas se están chocando para dar un beso, durase eternamente. Un pequeño cierre de ojos en ese momento exacto, mientras huelo que aún usas la colonia que tanto me encantaba, y mientras hueles que sigo usando el mismo champú de siempre. Me sigue encantando. Y sigo sintiendo que ese olor me relaja y me tranquiliza. Hay cosas que no cambian.


Con el segundo beso frunzo el ceño y marco una pequeña distancia. Ese segundo beso me lo has dado en la comisura del labio, aún recuerdas que me encantaban los besos ahí. Hay cosas que no olvidas.


¿Mi vida? Estupendamente. Igual que la tuya. Después de aquel adiós definitivo por el cual ninguno de los dos sabemos lo mal que lo pasó el otro, nuestras vidas se han llenado de éxitos y felicidad. Qué mentira. Ambos sabemos que nos echamos de menos mucho tiempo, hasta que la distancia hizo el olvido. Lo sabemos, tantas miradas que una tan clara lo dice todo.


Cuánto nos gustaría que el otro se arrastrase y llorase y suplicase que volviesemos de la mano al pasado. Pero eso sería mucho soñar.


Así que un adiós con la promesa de un café que los dos sabemos que nunca llegará, y nos vamos. No volvemos la cabeza, sería dar el brazo a torcer. Eso también nos gustaría ir contándolo por ahí.


Me pongo otra vez los auriculares y sigo mi trayecto, sin saber muy bien a dónde, sólo sé que mis piernas me llevan a algún lugar. Ya ni mi música escucho. Mientras en nuestras caras hay una sonrisa que se debate con algo de pena. A nuestra mente vienen mil recuerdos, todos ellos buenos. Pero en el momento que recordamos aquel definitivo adiós y el por qué de ese adiós, se nos borra esa sonrisa. Y se nos va de la cabeza la situación.


Llegamos a casa, y buscamos esas fotos para sentirnos en el pasado otra vez. Pero yo rompí todas las fotos y todo lo que me recordaba a ti. Me siento tonta y juro no volver a hacer eso con las fotos de quienes quiero sacar de mi vida para siempre. Tú te das cuenta de que no tienes ninguna foto porque nunca querías nuestras fotos. Que salías mal decías, aunque para mí eran perfectas esas fotos.


Me meto en la cama y cojo el móvil, con pretensión de enviarte un mensaje y tomarnos ese café. No me arrastro, arrastrate tú. Pero tú piensas lo mismo. Así que al final ponemos el móvil en la mesilla esperando que el otro de el paso de enviar ese mensaje.

Al final, nos dormimos, y mañana ya no recordaremos ésto.


Sólo ese silencio. Silencio de espera. Silencio.

Edurne (Edi)

5 de diciembre de 2009

Carta a un color

Querido color,

Todo no puede ser rosa nunca, lo dulce no es tan dulce si no existe lo amargo.
Creo que mi mundo rosa y lleno de sonrisas y felicidad no va más allá de hasta donde llega mi burbuja.
Debo salir de mi burbuja, he oído que hay más mundo.

Alguien me dijo alguna vez que la felicidad es una amiga infiel, que a veces te hace bien y a veces te hace mal.
Como dije en entradas anteriores, quiero mirarlo todo desde los ojos de un niño, para así no tener miedo ni odio.
Y recordar siempre las mil sonrisas que un día existieron.

Gracias por ese beso en la frente, y ese sms al móvil.
Gracias por verme cuando quiero ser invisible.

Próximamente: Me marcho al exilio.


Edurne (Edi)




4 de diciembre de 2009

Carta a una parte del cuerpo

Querida parte del cuerpo,

Cuentan que había una madre que quiso poner a prueba hasta dónde llegaba la capacidad de pensamiento de su hijo, a la vez que quiso enseñarle ciertos valores morales a través de una pregunta:

- "Dime hijo, ¿cual es la parte más importante del cuerpo?"

El niño no entendió qué quiso decir su madre con aquella pregunta, y mucho menos entendió qué respuesta tenía que dar.

Se tomó su tiempo, quiso reflexionar sobre la pregunta y sobre todo encontrar una respuesta acertada. Tras mucho pensar, creyó encontrar la respuesta:

- "¿Es posible que la parte más importante del cuerpo sea la cabeza? Sin ella no pensaríamos, no podríamos hacer nada...
- La cabeza es importante sin duda, pero no es la respuesta que debes encontrar.
- Entonces... ¿las piernas? Sin ellas no nos sujetaríamos ni caminaríamos, ni tampoco sin la columna.
- No hijo no. Debes pensarlo con más calma."

El niño por más que pensaba, no encontraba respuesta alguna. De este modo, muy a su pesar, se rindió y le pidió a su madre que le dijese la respuesta.

- "Me rindo, dime cuál es la parte más importante del cuerpo.
- La parte más importante del cuerpo es el hombro.
- ¿El hombro?
- Sí, el hombro. En el hombro de un amigo te puedes apoyar para recibir su cariño, afecto, apoyo, ánimo... Quien tiene un hombro de un amigo para apoyarse, tiene oro. Y quien tiene un amigo, tiene un tesoro."



Edurne (Edi)



" Creo que una vez recibí una carta, pero ya casi ni lo recuerdo."

3 de diciembre de 2009

Carta a Luna

Querida Luna,


Hoy podía ser un día 3 de Diciembre como otro cualquiera. El aniversario del fin de la guerra fría, cumpleaños de Bill Steer o también el Día Nacional de los Discapacitados...


Pero no. Hoy he conocido a la que 'casi' seguro será la última de mis primas. Digo 'casi' porque no las tengo todas conmigo.


Hace días decía que Luna no nacía, y anoche vino a este mundo. Yo aposté a que nacía el miércoles, pero por 30 hora he perdido la apuesta.


Dicen que nunca nadie se sentirá tan sólo como quien nunca ha recibido una carta. Aún queda mucho tiempo hasta que puedas leer y comprender una de mis cartas, así que por ahora sólo te escribiré ésta para que sepas que nunca estarás sóla.


Gracias por haber nacido hoy. O gracias por haber nacido en cualquier caso. Gracias por haberme sacado la sonrisa que necesitaba para este par de semanas tan decaídas que llevo.


Ahora a esperar a que nazca.......................... ¿Patricia? ¿Carla? ¿Rocío? No sé cómo se llamará, pero habrá que esperar a que nazca mi 3ª sobrina. Así sin comerlo ni beberlo mi vida se ha llenado de niños en muy poco tiempo :)


Aquí os dejo una foto, no es la mejor, pero está bien porque no había casi luz. Tiene todo el parecido a su madre, será una futura rubia casi albina :)



Edurne (Edi)

Carta a un cisne enfermo

Querido cisne enfermo,


Hay un cisne que muere cercado en un palacio.
Un cisne misterioso de ropaje de seda
que en vez de deslizarse en la corriente leda
se estanca fatigado de mirar el espacio.

El cisne es un enfermo que adora al dios de oro;
el sol, padre de razas, fecunda su agonía.
por eso su tristeza es una sinfonía
de flores que se entreabren en las sombras del lloro.

Tiene el pecho cruzado por un loco puñal,
gota a gota su sangre se diluye en el lago
y las aguas azules se encantarán bajo el mago
poder de los rubíes que destila su mal.

El alma de este cisne es una sensitiva…
no levantéis la voz al lado del estanque
si no queréis que el cisne con el pico se arranque
el puñal que sostiene su existencia furtiva.

Cuentan viejas leyendas que está enfermo de amor.
Que el corazón enorme se le ha centuplicado
y que tiene en la entraña como El Crucificado
un dolor que cobija todo humano dolor.

Y cuentan las leyendas que es un cisne-poeta…
Que la magia del ritmo le ha ungido la garganta
y canta porque sí, como el arroyo canta
la rima cristalina de su corriente inquieta.
…………………………………………………………

Yo he soñado una noche que el viejo palacio
era el cisne cansado de mirar el espacio.


(Alfonsina Storni)




Edurne (Edi)

2 de diciembre de 2009

Carta agobiante

Querida agobiante,


¿Nunca habéis sentido esa sensación de querer llorar de cansancio y no poder?


Esta situación es agobiante. Desde levantarme a las 6 de la mañana para coger el bus, mejor dicho, correr para coger el bus, ir a clase cargada con una mochila llena de libros, clases y apuntes, y salir antes de clase para coger el bus pegándome con la gente para tener sitio. Eso si no tenemos que quedarnos en el CRAI (ya sabéis, mi nuevo lugar de residencia) y volver a las 20'00 o 21'00 a casa, para seguir haciendo muchos deberes y pasar apuntes.


Encima estoy mala. No sé qué me ocurre, llevo como 7-10 días con un dolor en el costado izquierdo muy punzante que va y viene, y cuando viene me retuerzo sobre mí misma. Ya no puedo ni estar estirada. Además me duele mucho la cabeza y hoy tengo algo de náuseas y mareos y un poco de fiebre. Aunque lo peor es el dolor del costado.


Lo escribo por si hay algún lector que sea médico y me pueda echar un cable, porque con esos horarios ¿cuándo voy al médico? Me temo que tendré que aguantar hasta dentro de 10 días para ir al médico si ésto sigue así.


El agobio y estrés me puede. Quiero llorar por el cansancio pero estoy tan cansada que no puedo. Lo único que puedo es estar encorbada con la mano en la frente y una cara que mejor ni mirármela en el espejo. Aparte, sumémosle las ojeras que tengo por no poder dormir en condiciones.


Me gustaría ponerme delante del portátil y escribir algo productivo para mi blog. Pero no tengo ni tiempo ni fuerzas para ello, pero os tengo en mente, y en cuanto tenga un rato libre aquí me tendréis.


Y lo peor de todo es que no recuerdo haber sonreído hoy ni una sola vez.



Edurne (Edi)



PD: Os dejo una foto de mi sobri Paula, ¿linda eh?


1 de diciembre de 2009

Carta a una mudanza

Querida mudanza,

Sí bogueros, me he mudado. Ahora vivo en un lugar llamado CRAI. Vitoria ya no es casi ni mi ciudad dormitorio. Para quien no entienda ésto, me refiero a que todos los días de esta semana y todos los días de la semana que viene estaré en la uni desde las 8'30h, y las tardes las pasaré en el CRAI (biblioteca de la uni), hasta las 21'00 más o menos. Después vuelta a Vitoria, a dormir, y vuelta a lo mismo. Deberían hacerme algún tipo de mención, pero no soy la única que se pasa tanto tiempo allí trabajando, el grupo entero.

La razón es que tenemos que terminar el trabajo de Estudios Culturales, para entregarlo la semana que viene. Así que blogueros, perdonad mi mudanza bisemanal, pero es por una razón de mucho peso. Menos mal que aunque vaya a estudiar/trabajar tantas horas, voy muy contenta y con muchas ganas de hacer lo que hacemos, aunque duerma muy poco, esté cansadita y mi sonrisa a ratos es algo pobrecita. Incluso si miro a un punto fijo, peligra el que me duerma. Vocación se llama.



Me gustaría escribir, tengo un par de ideas que quiero compartir con vosotros. Pero ahora el deber me llama, voy a leerme y repasar alguna cosita para mañana. Os dejo un poema para que os entretengáis leyendo:




"Puedo escribir los versos más tristes esta noche.


Escribir, por ejemplo: “La noche esta estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos”.


El viento de la noche gira en el cielo y canta.


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.


En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.


Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.


Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.


Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.


Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.


Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.


La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.


Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.


De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.


Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.


Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.


Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo."


(Pablo Neruda)
Me encanta. Es de mis poemas favoritos junto con el de "Pandemica y Celeste" de Gil de Bernal, publicado hace algunas entradas.
Jo.. ¡me encanta la poesía! Quiero tener "20 Poemas de Amor y Una Canción Desesperada" en libro, para poder leerlo siempre que quiera. Algún día lo compraré...
Edurne (Edi)